Como ya hemos mencionado la preeclampsia y la eclampsia son dos trastornos médicos que pueden ocurrir durante el embarazo. La preeclampsia es una condición en la que una mujer embarazada tiene una presión arterial alta y niveles excesivos de proteína en la orina. La eclampsia es una forma más grave de preeclampsia y se caracteriza por convulsiones tónicas o clónicas durante el embarazo o en el período del posparto inmediato.
Mientras que la preeclampsia puede ser manejada con un control cuidadoso de la presión arterial y otros tratamientos, como el reposo en cama y la atención médica adecuada, la eclampsia es una emergencia médica que requiere tratamiento de urgencia.
La eclampsia es una complicación grave que puede ocurrir en mujeres embarazadas que experimentan hipertensión arterial durante el embarazo. Se caracteriza por la presencia de convulsiones y/o pérdida del conocimiento. La eclampsia es una emergencia médica que puede poner en peligro la vida de la madre y del feto.
Síntomas
Los síntomas de la eclampsia pueden incluir dolor de cabeza intenso, hinchazón de las manos y la cara, visión borrosa, náuseas y vómitos. Los tratamientos incluyen la administración de medicamentos para controlar la hipertensión arterial y prevenir convulsiones, y en algunos casos, el nacimiento del bebé. Es crucial que las mujeres embarazadas asistan regularmente a sus citas médicas prenatales para evitar esta y otras complicaciones del embarazo.
Otros síntomas son cambios en la micción, confusión, convulsiones y coma. Es importante que las mujeres embarazadas monitoreen cuidadosamente su salud y consulten a un médico si experimentan cualquiera de estos síntomas. Si se diagnostica eclampsia, se deben tomar medidas inmediatas para controlar la presión arterial, evitar convulsiones y proteger la salud de la madre y el feto. La eclampsia es una emergencia médica y requiere una atención médica urgente.
Primeros Auxilios
Los primeros auxilios para la eclampsia comienzan con la llamada inmediata a los servicios médicos de emergencia. Mientras se espera la llegada de la asistencia médica, es importante tranquilizar a la persona afectada y ponerla en una posición segura, y aplicar los primeros auxilios en casos de convulsiones, preferiblemente en una superficie plana y acolchada, con la cabeza ligeramente elevada. Se deben quitar cualquier objeto cercano que pueda causar lesiones durante las convulsiones. Además, es importante intentar proteger la vía aérea de la persona para garantizar una adecuada respiración. Es importante no colocar nada en la boca de la persona afectada durante las convulsiones. Si la persona embarazada está en el tercer trimestre, se puede recomendar el parto de emergencia para proteger a la madre y al bebé.
Prevención
Los síntomas de la preeclampsia y la eclampsia a menudo son similares, pero la presencia de convulsiones es un indicador claro de la eclampsia.
Ambos trastornos pueden ser muy peligrosos si no se tratan adecuadamente y, por lo tanto, es importante que cualquier mujer que experimente síntomas relacionados con la preeclampsia o la eclampsia busque atención médica inmediata.

Paula Rojas Hormazábal
Instructora en Primeros Auxilios, RCP y DEA. Técnico en Enfermería de Nivel Superior. Experto Técnico en Prevención de Riesgos. Heartsaver CPR /AED/ First-Aid Heart Center, National CPR Foundation. Cursos de Especialización en Harvard University, Medical School, Estados Unidos. Colegiada en Colegio Nacional Paramédico y TENS de Chile.